El déficit del sueño, una epidemia mundial
Entrevista al Dr. Pérez Chada para radio Mitre
En una entrevista con Magdalena Ruiz Guiñazú para radio Mitre, el Dr. Daniel Pérez Chada, Director de la Clínica del Sueño del Hospital Universitario Austral, explicó las consecuencias del déficit del sueño y las recomendaciones para poder conciliarlo.
El déficit de sueño es una especie de epidemia en la sociedad. Hace 40 o 50 años atrás dormíamos un 25% más. La ansiedad, la angustia, y algunas emociones están relacionados con el déficit del sueño. La falta de sueño produce cambios de conducta, irritabilidad y desajuste social.
Los adolescentes no deben dormir menos de 9 horas por noche. Los chicos que duermen menos horas por noche tienen menor rendimiento escolar. Por su parte, los chicos que son roncadores habituales a pesar de dormir la cantidad de horas necesarias, también tienen baja calidad de aprendizaje.
Lo que sucede es que el ronquido interfiere en la calidad del sueño y lo fragmenta.
Una de las enfermedades más recurrentes relacionadas con el sueño son las apneas.
Las apneas son pausas de la respiración durante el sueño que provocan una disminución del oxígeno en la sangre, una variación de la frecuencia cardíaca, aumento de la hipertensión arterial y fragmentación del sueño nocturno. Por consiguiente, las personas que padecen esta enfermedad, tienen manifestaciones inmediatas: somnolencias diurnas, cansancio, mal ajuste social, irritabilidad y consecuencias alejadas como por ejemplo, enfermedad cardiovascular.
Entre las pautas para la correcta higiene del sueño se encuentran: acostarse y levantarse en horarios regulares, no comer en forma copiosa a la noche, evitar el alcohol y los hipnóticos. Tampoco es bueno para conciliar el sueño la emisión de la luz leds antes de irse a dormir como, por ejemplo, la exposición a los teléfonos celulares.